top of page
  • Foto del escritorAngola

La parálisis del miedo

El miedo fue por años mi pesadilla más grande y lo único constante en mi vida, no sabía estar sin él, se me hizo costumbre y parecía que entre más luchaba en contra, más se apoderaba de mí.


Podía definirlo como mi peor frustración, el obstáculo que siempre paralizaba cualquier decisión Y entorpecía cualquier plan, no podía controlarlo, estaba ahí todo el tiempo. Me encontraba en el momento más obscuro y vulnerable de mi vida, tocando el fondo de un pozo que yo misma había construido en consecuencia de un pasado conflictivo no resuelto, el miedo finalmente se apoderó por completo de mí, me sentía perdida una vez más, por ser incapaz de enfrentarme a él, y no poder hacer lo que con tanta ilusión anhelaba.


En ese lugar profundo donde no había más donde ir, donde seguir igual ya no era opción, y victimizarme culpando a otros no me ayudaría a salir; lo mire de frente, y asustada lo invite a mi vida y con angustia le hice pasar, entre lágrimas lo abracé, lo sentí y después de una rato lo reconocí, pues había estado conmigo desde que yo era niña.


Hasta ese momento caí en cuenta de que yo lo había hecho mi enemigo, que era yo en contra de él, y no él en contra mía, que yo lo hice un obstáculo, y en mi incapacidad por hacer frente a mis problemas, siempre lo culpaba a él por arruinarlo todo. En ese segundo le agradecí por haberme acompañado a lo largo de tantos años, viviendo a mi lado cada batalla, enseñándome la precaución para no caer en peligro, poniendo en alerta mi intuición para que me alejara del riesgo.


Hoy entiendo que el miedo es parte de mí, qué está a mi favor en tanto con consciencia, aprenda a escuchar lo que en verdad necesito, hoy lo defino como mi virtud más grande.

Ese que te hace sentir un hueco en el estómago, qué te provoca sudor en las manos y temblor en las rodillas, ese que a las 3:45 de la madrugada no te deja dormir, ese miedo tan especial que te impulsa a saltar al vacío, a enfrentar el riesgo, en vez de paralizarte y desistir, el miedo sabio es lo que se siente al tomar decisiones de esas que te cambian la vida, ocupan fuerza, agallas y lo más importante, resiliencia para enfrentarte a un sinfín de retos que experimentarás fuera de tu zona de confort.


Lo que alguna vez fue angustia, hoy es el motivo para escuchar, y atender a mi intuición para tomar decisiones con cabeza fría.

Asumo que todos reconocemos esta emoción, aseguro que pocos nos damos cuenta del gran maestro que es nuestras vidas.

El miedo es inherente a nuestra especie, es lo que nos mantiene vivos y alerta para sobrevivir al peligro, que sea un obstáculo en tu vida o tu mejor aliado, dependerá de ti.

La diferencia entre accionar o desistir, gritar o callar, amar o sufrir, siempre será una decisión y el asumirla representará una vida llena de arrepentimientos y frustraciones o una llena de plenitud y vivencias sin límite.


¿Y tú, como eliges vivir el miedo?


Angola G.

Caminatas nocturnas de otoño. Liiffey river, Dublin, Ireland.

9 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
Publicar: Blog2_Post
bottom of page